viernes, 12 de septiembre de 2008

FOTO PROPIA PARA DON QUIJOTE DE LA MANCHA


Esta foto la tomé en el Museo de Arte Español Enrique Larreta, en la zona de los jardines, con el propósito de representar el castillo de los duques, donde se desarrolla la mayor parte de la novela “El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha”. Tomando en cuenta la detallada descripción que hace Miguel de Cervantes, no tuve dudas de que esta hermosa casona de estilo español la representaba perfectamente, no sólo por su estilo, sino también por sus grandes dimensiones. Esta antigua casa de veraneo cuenta con muchas habitaciones y está rodeada de amplios jardines similares a lo descripto en la novela.
A pensas ingresé al salón principal, el hall, recordé el momento en el que Don Quijote y Sancho Panza llegaron al castillo de los duques y al ingresar fueron recibidos por un grupo de criados; donde le dijeron a Don Quijote que se desnudara para mudarse de ropa.
“Luego fueron conducidos a una sala donde los esperaban más criados y allí le dijeron a Don Quijote que se desnudara, que ellos tenían preparada ropa limpia para él. Pero el caballero muy pudoroso, no quiso; pidió que le dieran ropa a Sancho para cambiarse después y así lo hizo, una vez que estuvieron en la habitación que les tenían asignada.”
También dentro del hall pude apreciar una armadura, tal como la que usaban los verdaderos caballeros. Eso me trajo recuerdos sobre todas las aventuras que había vivido el caballero junto a su fiel escudero. Y al ir recorriendo las diferentes habitaciones, me di cuenta de que en esa época los frailes, curas y en definitiva, toda la orden religiosa, eran muy apreciados.
Y el último lugar que recorrí fueron los bellísimos e imponentes jardines. A pesar de que no fueran tan grandes como yo me imagino que son los del duque de la novela, pude ver (en cierta forma) allí a Altisidora cantándole a Don Quijote cuando a éste le “llovieron” gatos del “cielo”. También recordé una de las últimas partes de esta peculiar novela; cuando Altisidora estaba encantada y para revertir el hechizo, Sancho debía pincharse a sí mismo.

1 comentario:

paula luna dijo...

Muuuy bien, gracias. Qué trabajo.